Fisura anal


Una fisura anal es un pequeño desgarro en el mismo margen del ano.  Es una patología muy comun en la población general, pero a menudo se confunde con otras causas de dolor y sangrado, tales como las hemorroides.

¿Qué síntomas tiene?

Los síntomas típicos de una fisura anal incluyen dolor severo durante y especialmente después de defecar, con una duración de varios minutos a unas pocas horas.  Los pacientes también pueden notar sangre roja por el ano que se puede ver en el papel higiénico o en las heces.

¿Cómo me he podido hacer una fisura en el ano?

Fisura analLas fisuras son causadas generalmente por un traumatismo en el revestimiento interno del ano. La defecación dura y seca suele ser responsable, pero las heces blandas y diarrea también puede ser la causa.  Después de un movimiento intestinal, el dolor anal severo puede producir espasmo del músculo del esfínter anal, lo que resulta en una disminución en el flujo de sangre al sitio de la lesión, perjudicando así la curación de la herida.

Otras causas menos comunes incluyen enfermedades inflamatorias y ciertas infecciones o tumores anales.  Las fisuras anales pueden ser agudos (inicio reciente) o crónica (presente durante un largo periodo de tiempo).  Las fisuras crónicas pueden ser más difíciles de tratar, y también pueden tener nodulo externo asociado llamado hemorroide centinela.

¿Cómo se trata?

La mayoría de las fisuras anales no requieren cirugía.  El tratamiento más común para una fisura anal aguda consiste en una dieta alta en fibra y el uso de suplementos de fibra. Anestésicos tópicos para el dolor y las bañeras calientes (baños de asiento) durante 10-20 minutos varias veces al día (sobre todo después de los movimientos intestinales) son calmantes y promover la relajación de los músculos del ano, lo que puede ayudar al proceso de curación.

Otros medicamentos (como la nitroglicerina o diltiazem) se pueden prescribir lo que permite la relajación de los músculos del esfínter anal. Su cirujano repasará los beneficios y efectos secundarios de cada uno de ellos con usted. Las  fisuras crónicas son generalmente más difíciles de tratar, y el cirujano puede aconsejar un tratamiento quirúrgico.

¿En qué consiste la cirugía?

La técnica quirúrgica para el tratamiento de fisura anal es la división de una porción del esfínter anal interno (esfinterotomía lateral).  Todos los procedimientos quirúrgicos implican algunos riesgos, y una esfinterotomía rara vez pueden interferir con la capacidad para controlar el gas y las heces. Si esta secuela aparece en el postoperatorio suele ser temporal y desparecer antes de los 15 dias. De cualquier manera dicah técnica debe de ser realizada por un coloprotologo experto porque el conocimiento del estado pélvico y esfinteriano del paciente puede motivar secciónes del esfínter mas pequeñas o bien contraindicar la cirugía.

El dolor agudo después de la cirugía a menudo desaparece después de unos pocos días.  La mayoría de los pacientes serán capaces de volver al trabajo y reanudar las actividades cotidianas en pocos días después de la cirugía.