Junto con la enfermedad de Crohn constituyen lo que se denomina enfermedad inflamatoria intestinal. Se trata de una enfermedad autoinmune donde el propio paciente desarrollar mecanismos inmunológicos contra sus propios tejidos. La colitis ulcerosa afecta únicamente al intestino grueso (colon) mientras que la enfermedad de Crohn lo puede hacer a cualquier parte del tubo digestivo desde la boca al ano. Por tratarse de una enfermedad sistémica es frecuente que aparezcan síntomas relacionados con otros sistemas extradigestivos.

¿Qué es la colitis ulcerosa?

La colitis ulcerosa es una inflamación de la mucosa del intestino grueso (colon y recto). Los síntomas incluyen sangrado rectal, diarrea, calambres abdominales, pérdida de peso y fiebre. Además, los pacientes que han tenido una amplia colitis ulcerosa durante muchos años tienen un mayor riesgo de desarrollar cáncer de intestino grueso.

¿Cómo se trata la colitis ulcerosa?

El tratamiento inicial de la colitis ulcerosa es médico, el uso de antibióticos y medicamentos antiinflamatorios, como aminosalicilatos. Si esto no funciona, la prednisona (corticoide) se puede utilizar por un período corto de tiempo, pero el uso a largo plazo puede asociarse con efectos secundarios significativos. Si la prednisona es ineficaz o no puede realizarse de forma discontinua, inmunomoduladores, tales como 6-mercaptopurina o azatioprina se pueden utilizar para controlar la enfermedad activa que no merece la hospitalización. Con el fin de mantener el control de la enfermedad, aminosalicilatos o inmunomoduladores se utilizan como tratamiento de mantenimiento a largo plazo. 

¿Cuándo es necesaria la cirugía?

La cirugía está indicada para pacientes que tienen complicaciones que amenazan la vida de las enfermedades inflamatorias intestinales, como la hemorragia masiva, perforación o infección. También puede ser necesario para aquellos que tienen la forma crónica de la enfermedad, que no mejora con el tratamiento médico. Es importante que el paciente se sienta cómodo que todo el tratamiento médico razonable se ha intentado antes de considerar el tratamiento quirúrgico. Además, los pacientes con colitis ulcerosa de larga duración podrían ser candidatos para la eliminación del intestino grueso, debido al aumento del riesgo de desarrollar cáncer.

¿Qué operaciones están disponibles?

Históricamente, la operación estándar para la colitis ulcerosa ha sido la eliminación de todo el colon, el recto y el ano. Esta operación se denomina proctocolectomía y se puede realizar en una o más etapas . Sin embargo, esta operación requiere la creación de una ileostomía y el uso de por vida de un aparataje en la pared abdominal (estoma) para recoger los residuos desde el intestino.

Algunos pacientes pueden ser tratados mediante resección del colon, con preservación del recto y el ano. El intestino delgado a continuación, puede volver a conectarse al recto y la continencia es conservada. Esto evita una ileostomía, pero los riesgos de colitis activa en el remanente rectal, el aumento de frecuencia de las deposiciones, urgencia defecatoria y la posibilidad de cáncer en el recto remanente, hacen de esta cirugia que no sea muy utilizada

¿Existen otras alternativas quirúrgicas?

El procedimiento ileoanal es el tratamiento quirúrgico más común para el tratamiento de la colitis ulcerosa. Este procedimiento elimina la totalidad del colon y el recto, pero conserva el canal anal. El recto se sustituye con el intestino delgado, que se remodeló para formar una pequeña bolsa (reservoreo) . Por lo general, se crea una ileostomía temporal, que en un segundo tiempo se cerrara.